Comunicado de prensa
El programa Mujer Emprende del SernamEG Región de Antofagasta comenzó a inscribir mujeres mayores de 18 años de edad, que cuenten con un negocio de al menos un año de antigüedad, por medio de un banner dispuesto en sernameg.gob.cl.
Para la Directora nacional del SernamEG, Priscilla Carrasco Pizarro, “sabemos lo importante que es el programa Mujer Emprende para apoyar a las mujeres con sus negocios y que puedan mejorar la calidad de vida de ellas y sus familias: por lo mismo, vamos a ampliar la fecha de postulaciones en las regiones afectadas por los incendios y también vamos a flexibilizar los requisitos en esos lugares”.
Una vez inscritas y aceptadas las postulaciones, las mujeres accederán a un plan de trabajo que considera capacitaciones, por ejemplo, en la Escuela Mujer Emprende que este año cuenta con mil 500 cupos a nivel país, mentorías mediante convenios con universidades locales, la consecución de recursos para fortalecer el negocio con Sercotec y la facilitación de espacios de comercialización en dependencias de Homecenter Sodimac, en la cadena de supermercados Líder, Mall Plaza Calama y Antofagasta, en Espacio Urbano, en las calles más concurridas de la ciudad y en vitrinas virtuales creadas en colaboración con la Universidad de Santiago.
“Este año el desafío estará puesto en seguir mejorando sus habilidades, ampliar sus oportunidades de negocio y fortalecer las redes que puedan generar entre ellas y de esta forma alcanzar logros significativos como aconteció hace años con la formación de la primera cooperativa de emprendedoras de la región que nació al alero de nuestro Servicio”, afirmó la Encargada Regional del Programa Mujer Emprende, Vianka Pavlov Pulido.
Este programa permitió que el año pasado viajaran a Santiago tres representantes del interior de la zona para comercializar sus productos en la Expo Feria de la Mujer Emprendedora Indígena que reunió a mujeres de diversos pueblos originarios del país.
Entre los asesoramientos que recibirán este año se encuentran el acompañamiento para la formalización del negocio y el aprendizaje de técnicas de comercialización por internet, puesto que esta modalidad de trabajo permitió mantener los negocios en los tiempos más álgidos de la pandemia de covid -19 que obligó a las emprendedoras a vender sus productos desde sus hogares.
Según el reporte GEM que prepara cada año el Centro de Emprendimiento y de la Pyme de la Universidad Católica del Norte, la actividad emprendedora inicial de mujeres en la región se elevó de un 21,9 a un 27,1 por ciento entre 2020 y 2021; en tanto que los negocios establecidos de mujeres, esto es que lograron sobrepasar los tres años de duración, pasó de 5,5 al 1,5 por ciento entre 2020 y 2021.
“Recursos productivos, financiamiento, información, calidad, tecnología y mercados son los conceptos claves que debe tener en cuenta toda emprendedora y a ello apunta este programa; pero no sólo eso, puesto que las ayudamos a vincularse con otros programas de nuestro Servicio como el programa 4 a 7 o Violencia Contra las Mujeres a fin de brindarles un desarrollo integral y potenciar sus diversas autonomías”, concluyó Pavlov.