El Gobierno ha informado sobre la implementación de la nueva Ley de Insolvencia, la cual introduce procedimientos simplificados para que las pequeñas empresas con dificultades financieras puedan reestructurar sus deudas de manera económica y con menos trámites burocráticos.
A partir del viernes 11 de agosto de 2023, la ley está en efecto y actualiza la normativa previa de insolvencia, ofreciendo a individuos y pequeñas empresas con problemas de endeudamiento o solvencia mayores oportunidades para alcanzar acuerdos de pago con sus acreedores.
Así lo confirmó la Seremi de Economía, María Teresa Véliz, quien junto con la encargada regional de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento (Superir), quienes en una reciente entrevista comentaron sobre las bases en que se sustenta esta normativa.
Fue justamente la jefa de la cartera económica regional quien comentó este hito, indicando que «esta modificación de la ley, lo que incorpora, son acápites relacionados con resolver las situaciones que hasta ahora se han visto como trabas dentro del proceso de reorganización y de liquidación; en el sentido de que los accesos son de alto costo y, o muy burocráticos. Entonces, desde esa perspectiva, los pilares que contempla la normativa están relacionados con disminuir la pérdida social y económica relacionada con la tramitación, agilizar y simplificar los aspectos burocráticos que se desarrollan dentro de este proceso, crear procedimientos concursales simples y ágiles y además de a bajo costo Incrementar las tasas de recuperación de los créditos y que haya mayor certeza jurídica sobre los créditos en general», cerró Véliz.
La misma Seremi agregó que estas mejoras de la ley implican un mayor acceso para las personas naturales y las micro y pequeñas empresas a procedimientos simplificados, más flexibles, menos burocráticos y más económicos en su acceso, permitiéndoles tener una segunda oportunidad en sus actividades económicas.
Dentro de esa misma línea, se sumó la encargada regional de Superir, Claudia Gaona, quien comentó que, a partir del día, las personas que emiten boletas de horarios van a ser considerados para poder tener una asesoría gratuita en la Superintendencia, indicando además que, «ese antecedente es importante para que la ciudadanía sepa que en la Superintendencia van a tener una orientación acerca de cómo renegociar estas deudas. Porque muchas veces se ven enfrentadas a estos grandes gigantes del retail, bancos y financieras, que a lo mejor son inentendibles, con un vocabulario muy financiero, que a veces ni uno lo entiende. Y por eso el llamado es a que se acerquen a las oficinas para revisar y entender cuál es la situación económica, qué les están ofreciendo estas entidades, y si efectivamente calzan de acuerdo a los requisitos que establece esta normativa, para solicitar una renegociación de persona deudora».
La nueva normativa reformada también trae mejoras para reducir trámites innecesarios, como la eliminación de audiencias separadas de voto y liquidación, y promueve el uso de la tecnología permitiendo reuniones virtuales de acreedores, agilizando así los procesos.
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