Por Equipo de prensa CoWeb
El liderazgo femenino ha resultado ser un hecho transformador dentro del panorama empresarial contemporáneo. Es así como lo que alguna vez fue un terreno predominado por hombres, ahora se ha convertido en un espacio diverso, donde las mujeres están dejando huellas de manera notable tras luchar contra barreras sociales y culturales.
Este es el caso de Darla Rojas Filiberto, quien emprendió con su negocio: La Tienda de Polita, un emprendimiento que busca decorar espacios de los pequeños del hogar con accesorios y juguetes.
«Mis ganas de emprender fueron, principalmente, el tener más tiempo para mí y poder compartir más con mis hijos. Dije «si trabajo tanto en una empresa que no es mía, doy lo mejor en este trabajo por un sueldo bajo y nada de reconocimiento, ¿por qué no hacerlo por algo propio?». Fue un tremendo desafío, ya que siempre lo enfoque como mi trabajo que me permitiera tener mi solvencia económica y no como un hobbie», comentó.
Darla, forma parte del 25,2% de mujeres que posicionan a nuestro país como el tercero en el ranking mundial de emprendimiento de mujeres según el informe «Global Entrepreneurship Research Association», lanzado el 2022.
La emprendedora agregó que «quienes quieran comenzar en este mundo, háganlo con convicción, crean en sus sueños en sus ganas de salir adelante, y que nada y nadie les impida hacerlo, ¿es fácil? no, no lo es pero imposible tampoco, solo no deben abandonar el barco cuando la tormenta es fuerte, en ese momento con más fuerzas deben tomar el timón, esto nos hace más fuertes para seguir en este hermoso camino que es el emprendimiento».
Liderazgo femenino y economía
Bajo esta misma línea y con una mirada regional, la investigadora y Directora del CEMP de la Universidad Católica del Norte, Gianni Romaní, comentó que «aquí en la región solo en el ámbito empresarial, tenemos muchas mujeres líderes no solo a la cabeza de sus empresas sino ocupando espacios en diferentes directorios. Hay una presencia cada vez mayor de estas mujeres pero se requiere más visibilización de las mismas, sobre todo para las nuevas generaciones que sirvan de modelos de rol. Empresarias como Georgina Kong, Pamela Garrido, Teresa Gajardo, Rosa Ester Salazar, Alejandra Jimenez y muchas más», subrayó la investigadora de la UCN.
A lo que agrega que «tener más mujeres liderando en diferentes ámbitos implica la inclusión de una mirada de género en esos sectores. Hay evidencia empírica que muestra, por ejemplo, que empresas lideradas por mujeres tienen igual o mayor rentabilidad que aquellas lideradas por hombres. Y esto sin duda repercute en el desarrollo económico y en el crecimiento de la región».
Sin embargo, los resultados del informe GEM que realiza cada año el Centro de Emprendimiento y de la Pyme de la Universidad Católica del Norte, confirma que la actividad emprendedora de mujeres en etapas tempranas – con menos de tres años de haberse creado el negocio- disminuyó ligeramente del 27,1% en 2021 al 26,3 % en 2022, sin embargo, la tasa de empresarias establecidas con más de tres años ha tenido un alza significativa de un 2,3 por ciento a un 5,6 en esos años.
Los últimos años han resultado difíciles en todo orden de cosas, en especial a lo que se refiere a lo avanzado económicamente por las mujeres, según lo comenta la Directora Nacional del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género, SernaMEG, Priscilla Carrasco Pizarro, quien comentó que «el año pasado las mujeres se vieron impedidas de seguir trabajando remuneradamente y quienes lo hicieron por vía remota desde sus hogares se vieron con la disyuntiva de asumir casi en totalidad los deberes del hogar».
Programas para iniciar
El Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género cuenta con programas dirigidos en fortalecer las habilidades de las mujeres que permiten acceder a una fuente de empleo remunerado para reafirmar la autonomía económica.
«Los programas Mujer Emprende y Jefas de Hogar están encaminados en atender las necesidades de una mujer que tenga sólo una idea de negocio y, para el caso del Mujer Emprende, con emprendimientos con al menos un año de antigüedad. El mero hecho de acercarse a nuestra institución buscando ayuda es ya un hecho tremendo. A partir de ahí hemos logrado generar una sinergia entre ellas, mediante su participación en cursos y mentorías, concursos de financiamiento como el Capital Abeja, han usado espacios en recintos privados y calles públicas para comercializar, así también han tenido la oportunidad de asistir a ferias nacionales como la Expo Mujeres Emprendedoras Indígenas que convoca a representantes de cada región entre septiembre y octubre», comentó la Directora Regional de SernaMEG, Priscilla Olivares.
Desafíos y futuro
Respecto a los próximos desafíos dentro de esta área, la Directora del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género, menciona que el desafío es empoderar a las mujeres para que se integren plenamente en el ámbito productivo, superando barreras culturales y sociales. El compromiso gubernamental se refleja en un proyecto de fomento al emprendimiento que busca beneficiar a más de tres mil mujeres, proporcionando herramientas y oportunidades para su desarrollo.
En este contexto, el emprendimiento se convierte en un motor de cambio y progreso y el verdadero empoderamiento de las mujeres radica en brindar no solo oportunidades económicas, sino también las herramientas y el apoyo para que puedan trascender las barreras culturales y sociales que limitan su crecimiento.
Con iniciativas que promuevan el emprendimiento femenino a través de academias, ruedas de negocios y espacios de comercialización, se está construyendo un camino hacia un futuro donde cada mujer tenga el poder de forjar su propio destino y contribuir al desarrollo de su comunidad.