Por equipo de prensa CoWeb
En esta oportunidad de Emprendid@s, te presentamos la historia de María Paz Castillo, una antofagastina emprendedora que decidió unir su experiencia profesional y personal para dar vida a la Fundación Uroboro Educación, con un objetivo claro: brindar herramientas esenciales a las comunidades educativas para que se conviertan en entornos inclusivos.
María Paz Castillo, antofagastina, enfermera, coach y madre, encontró su motivación en los desafíos que encontró por el autismo de sus hijos, como el desconocimiento y la discriminación, lo que la llevó a crear la Fundación Uroboro Educación.
«Nuestro principal foco para el próximo año es trabajar con comunidades de riesgo social, donde la inclusión en la primera infancia es un objetivo primordial para nosotros. Porque finalmente esto se basa en un derecho fundamental: el derecho a la educación que nuestros niños y niñas debieran tener y que no necesariamente se les entrega debido a la falta de herramientas», destaca su fundadora.
Con solo un año de existencia, esta fundación ha centrado su atención en un programa innovador para la primera infancia, dirigido a comunidades de menos recursos y con el objetivo claro de fomentar la inclusión:«Cuando uno habla de inclusión, piensa que se necesitan recursos… y no es así, la inclusión es tan simple como informar, que la gente comprenda de qué es lo que estamos hablando, comprenda que tú incluyes cuando aceptas lo distinto y cuando aceptas incluir en tu comunidad a personas que son diferentes, que piensan diferentes y que actúan distinto».
Su visión va más allá de simplemente proporcionar recursos; busca crear un cambio duradero en la mentalidad y la cultura de estas comunidades.: «Lo que a nosotros nos interesa es lograr hacer transformaciones, una gestión del cambio, una transformación cultural … que tenga un seguimiento, un acompañamiento, que podamos nosotros dejar instalada esa mirada en la comunidad», comentó María Paz.
Revisa la entrevista completa a María Paz Castillo:
